PERSONA ASERTIVA: QUÉ ES, CARACTERÍSTICAS Y CÓMO SER ASERTIVO

La asertividad ha pasado de ser una palabra casi exclusivamente utilizada en entornos psicológicos a ser un vocablo muy popular. Pero… ¿sabemos realmente qué es la asertividad y qué es ser una persona asertiva?

¿QUÉ ES SER ASERTIVO?

La asertividad es un estilo de comunicación que nos permite optimizar las posibilidades de conseguir nuestros objetivos. Dicho de otro modo, es una habilidad que nos permite defender nuestros derechos personales, sin atacar los derechos de los demás, que te permite expresar tus sentimientos, pensamientos y opiniones, sin ofender los de los demás. Puede que todavía no te quede del todo claro qué significa ser asertivo. No te preocupes, que aquí te explico las características básicas de una persona asertiva.

¿QUÉ CARACTERÍSTICAS TIENE UNA PERSONA ASERTIVA?

Las personas asertivas se caracterizan por respetar los derechos asertivos, tanto cuando se aplican a sí mismxs, como cuando se aplican a los demás. Veamos cuáles son estos derechos que es vital que conozcamos de cara a mejorar nuestras habilidades asertivas:

DERECHOS ASERTIVOS: Tienes derecho a:

  • Ser tratadx con respeto y dignidad.
  • Tener y expresar mis propios sentimientos y opiniones.
  • Ser escuchadx y tomadx en serio.
  • Juzgar mis necesidades, establecer mis prioridades y tomar mis propias decisiones.
  • Decir “No” sin sentir culpa.
  • Pedir lo que quiero (sabiendo que mi interlocutor me puede decir que no).
  • Cambiar (de opinión, de actitud, de comportamiento…).
  • Cometer errores.
  • Pedir información y ser informadx.
  • Obtener aquello por lo que pagué.
  • Ser independiente.
  • Decidir qué hacer con mi tiempo, cuerpo, propiedades… mientras no viole los derechos de los demás.
  • Gozar y disfrutar.
  • Tener éxito.
  • Tu descanso y al aislamiento (siendo asertivo).
  • Superarme incluso superando a lxs demás.
  • No ser siempre asertivo.

Teniendo en cuenta estos derechos, ¿cuáles serían las características típicas de una persona asertiva?:

  • Sabe decir no y poner límites
  • Sabe expresar sus sentimientos y opiniones de forma tranquila, sin ofender los de los demás
  • Acepta críticas
  • Sabe pedir ayuda
  • Reconoce sus errores y pide disculpas

¿Y QUÉ PASA SI NO SOY ASERTIVX?

Si no eres asertivx, no implica que no sepas comunicarte, sino que lo harás de una forma menos efectiva. Existen otros tipos de comunicación no asertiva, en los que quizás te reconozcas:

1. Comunicación pasiva

Es característica de aquellas personas que anteponen los derechos de los demás a los suyos propios. Suelen tener un tono de voz suave, a veces titubeante, o en modo de disculpa. Minusvaloran sus opiniones y les cuesta expresar sus sentimientos. Presentan dificultades para mantener el contacto visual y pueden mostrarse ansiosos en las interacciones sociales, tendiendo a mantener un perfil bajo. Suelen ser personas inseguras, indecisas, influenciables y complacientes. Ejemplo: un hombre pide en un restaurante un filete bien hecho y se lo traen poco hecho. No se queja y ante la pregunta del camarero de cómo ha estado la cena, dice que todo bien mientras agacha la cabeza.

2. Comunicación Agresiva

Es características de personas que consideran que sus derechos están por encima de los de los otrxs y no les importa pisarlos si es necesario para conseguir sus objetivos. Su tono de voz es alto e imperativo, tendiendo a invadir el espacio personal de su interlocutor en la comunicación no verbal, y manteniendo una mirada fija y desafiante.  No tienen capacidad de escucha y la empatía brilla por su ausencia. Ejemplo: Un trabajador pide a un compañero unos datos para terminar un informe y éste le dice: “Búscate la vida. Yo no soy una ONG”.

3. Comunicación Pasivo-agresiva

Es característica de personas que expresan sentimientos negativos indirectamente, de forma encubierta, por ejemplo con ironías, sarcasmos, o hablando en tercera persona. Son ambiguos y pueden mostrar acuerdo en algo, pero luego hacer lo contrario. Ejemplo: En el instituto un grupo de alumnos tiene que hacer un trabajo en común y se ponen de acuerdo en cómo hacer la presentación.  A la hora de presentarlo al profesor, el encargado de hacerlo se salta los parámetros pactados y lo hace a su manera, dejando en evidencia al resto del grupo.
Ahora que ya conoces todos los estilos de comunicación, ¿cuál es el estilo que más te representa? Este gráfico puede serte útil para localizarte dentro de alguno de estos cuadrantes:

Independientemente de cuál sea tu estilo de comunicación predominante, lo recomendable es siempre moverse en torno a la asertividad, pues como hemos dicho antes, es la comunicación asertiva la que optimiza las posibilidades de conseguir nuestros objetivos, y en caso de no conseguirlos, saber que hemos hecho todo lo que estaba en nuestra mano.  Bueno, pues vamos a saber un poco más de cómo ser (más) asertivo.

¿CÓMO SER ASERTIVO?

Si quieres ser asertivo o asertiva tienes unos cuantos retos por delante… pero no desesperes. La asertividad es una habilidad y como toda habilidad el secreto está en la práctica. Cuanto más practiques, más fácil te resultará y más cómodx te sentirás con ella hasta que se convierta en tu forma habitual de comunicación, casi sin darte cuenta. Lo más difícil es arrancar.  Luego es mucho más sencillo de lo que parece y con su uso progresivo notarás cómo tu autoestima crece y se refuerza.

 

Para conseguirlo, aquí van algunas claves a tener en cuenta para llegar a ser una persona asertiva:

1. Habla de forma directa y tranquila:

Mantén el contacto ocular sin resultar invasivo, un tono de voz fluido de volumen medio, con una postura relajada, evitando muletillas, pero no dudes en hacer pausas o silencios si lo necesitas. No des rodeos en la conversación y di lo que quieres decir de forma directa, mostrándote firme pero no agresivo.

2. Expresa tus sentimientos, pensamientos y opiniones:

Incluso cuando no son compartidos por lxs demás. No temas hacer peticiones o mostrar desacuerdo si algo no te encaja o no te apetece.

3. Respeta las opiniones de lxs demás:

Aunque no las entiendas ni las compartas, y no intentes convencer al mundo a toda costa de tu visión.

4. Saber poner límites y decir que no:

Sin sentir culpa o remordimiento: decir no, no es egoismo, es respeto a unx mismx. Es una forma necesaria de cuidarte y cultivar tu amor propio.

5. Haz halagos y recíbelos con agradecimiento :

Sin minusvalorar o minimizar tus dotes (es vital para tener una sana autoestima). No te sientes ni mejor, ni peor que lxs demás.

6. Trabaja tu autocontrol emocional:

Si estás airadx, rabiosx, o lejos de la serenidad, aléjate de la situación y vuelve a ella cuando puedas comunicarte de una forma más serena. La impulsividad y la falta de autocontrol son enemigos de la asertividad.

Y si todo esto se te hace demasiado cuesta arriba, no olvides acudir a nuestro equipo de psicólogas quiénes podrán darte las herramientas que necesitas para emprender tu camino hacia la asertividad.

Rebeca Lajos Rañó
Psicóloga en Aidé