COMUNICACIÓN ASERTIVA: QUÉ ES, TÉCNICAS Y EJEMPLOS PARA MEJORAR LA ASERTIVIDAD EN LA COMUNICACIÓN

¿Te cuesta expresar tus deseos y necesidades de manera clara y respetuosa? ¿Sientes que, a menudo lxs demás no te comprenden o no valoran tus opiniones? Si es así, este artículo es para ti.

Como veíamos en nuestra anterior entrada del blog: Persona asertiva: qué es, características y cómo ser asertivo, la comunicación asertiva es una habilidad fundamental en nuestras interacciones diarias. Nos permite expresar nuestras opiniones y sentimientos de manera clara y respetuosa, al tiempo que mantenemos una actitud abierta hacia lxs demás y nos permite defender nuestros derechos personales sin ofender los derechos de lxs demás. En este artículo, exploraremos con algo más de profundidad qué es la comunicación asertiva, por qué es importante y cómo podemos mejorarla en nuestra vida cotidiana con diferentes técnicas y ejemplos prácticos.

¿Qué es la comunicación asertiva?

La comunicación asertiva se define como un estilo de comunicación en el que expresamos nuestras necesidades, opiniones y sentimientos de manera honesta y directa, respetando al mismo tiempo los derechos y opiniones de los demás. Se caracteriza por ser clara, directa, respetuosa y empática. Como decíamos, es una habilidad la mar de útil e interesante en nuestro día a día, ya que nos ayuda a establecer relaciones más saludables y satisfactorias, a resolver conflictos de manera constructiva y a aumentar nuestra autoestima y confianza en nosotrxs mismxs. Vamos, que es un verdadero “chollo”.

Técnicas para mejorar la asertividad en la comunicación

Si quieres mejorar tu autoestima y comunicarte de una manera óptima en cualquier contexto social, no dejes pasar estas recomendaciones basadas en técnicas asertivas:

1. Usa los mensajes “Yo”

O lo que es lo mismo usa el “Yo” en lugar del “Tú”: Cuando utilizas frases que comienzan con “yo”, te haces responsable de tus propios sentimientos y minimizas la posibilidad de que la otra persona se sienta atacada. Esto facilita una comunicación más abierta y menos defensiva. Evita el lenguaje acusatorio y comunica cómo te sientes utilizando expresiones que comienzan con “Yo me siento…”, en lugar de culpar o criticar a lxs demás. Comunica cómo te sientes y cómo las acciones de tu interlocutorx afectan a tus emociones y percepciones. Ejemplo:

  • No asertivo: “Siempre llegas tarde cuando quedamos. No te importo…” (actitud victimista, reactiva y nada responsable emocionalmente).

  • Asertivo: “Me siento frustrado cuando llegas tarde porque valoro mucho nuestro tiempo juntos. Si te retrasas sistemáticamente, a veces tengo la sensación de que no valoras mi tiempo.

2. Expresa tus necesidades y deseos de manera clara

Ser asertivx implica ser directx y específicx sobre lo que necesitas o deseas, sin rodeos ni ambigüedades. Esto ayuda a que la otra persona entienda más claramente tu perspectiva, sin titubeos, ni “paños calientes”. Ejemplo:
  • No asertivo: “Sería bueno, si tú lo ves procedente, si pudiéramos pasar más tiempo juntos.”

  • Asertivo: “Me gustaría que dedicáramos al menos una noche a la semana para hacer algo juntos, como ver una peli o cenar juntos.”

3. Escucha activamente

La asertividad no solo se trata de expresar tus propios sentimientos y pensamientos, sino también de escuchar y atender y entender a lxs demás. Practica la escucha activa mostrando interés genuino, afirmando, apoyando tu lenguaje verbal con el no verbal (contacto ocular, afirmaciones gestuales…), haciendo preguntas aclaratorias y reflejando lo que has escuchado. No juzgues ni interrumpas y si lo ves necesario, repite lo que has escuchado para asegurarte de que has entendido correctamente. Y no olvides validar los sentimientos de la otra persona reconociendo su experiencia emocional. Ejemplo:

  • No asertivo: Interrumpir o pensar en tu respuesta mientras la otra persona habla, o mirar para otro lado o consultar el móvil mientras te están hablando.

  • Asertivo: “Lo que entiendo por lo que dices es que te sientes abrumado con el trabajo. ¿Hay algo en lo que te pueda ayudar?”

4. Di “No” cuando sea necesario

Aprender a decir “no” de manera respetuosa es crucial para mantener límites saludables y proteger tu tiempo y energía. Cuando dices “si” a alguien te estás diciendo no a ti (ten en cuenta lo que implica ese coste de oportunidad). Y no olvides que decir no, no implica que necesites justificarte excesivamente. Toma consciencia de tus necesidades, límites personales y valores. Esto te ayudará a establecer límites claros y a comunicarlos de manera efectiva a los demás. Ejemplo:
  • No asertivo: “No creo que pueda… No me viene bien… Bueno, pero quizás pueda intentarlo.”

  • Asertivo: “No, no puedo hacerlo esta vez. Tengo otros compromisos que necesito atender.”

5. Usa el lenguaje corporal adecuado

Tu lenguaje corporal debe ser congruente con tus palabras. Una postura abierta y relajada, gestos naturales y un tono de voz firme pero calmado pueden reforzar tu mensaje. Ejemplo asertivo:

  •  Si quieres pedir un aumento salarial, mantén una postura erguida, las manos relajadas, mantén un buen contacto visual y habla con un tono seguro y tranquilo. El no, ya lo tienes y no tienes nada que perder. Y no olvides que pidiendo de forma asertiva optimizar las posibilidades de conseguir lo que quieres.

6. Practica la empatía

Mostrar empatía ayuda a crear una conexión más profunda y a reducir posibles tensiones. Reconocer los sentimientos y perspectivas de lxs demás puede facilitar la resolución de conflictos. Ejemplo:
  • No asertivo: “No entiendo por qué te molestas tanto por eso. Es una chorrada… Tienes la piel demasiado fina”.

  • Asertivo: “Puedo ver que esto es realmente importante para ti. ¿Qué crees que podríamos hacer para encontrar una solución que funcione para ambos?”

7. Maneja las críticas y los conflictos de manera calmada y reflexiva:

  1. Cuando recibas críticas o te enfrentes a conflictos, tómate un momento para respirar profundamente y pensar antes de responder. Evita reaccionar de manera impulsiva o defensiva. Busca soluciones mutuamente beneficiosas y en lugar de centrarte en quién tiene la razón, trata de buscar soluciones que satisfagan las necesidades de ambas partes (ya sabes, el clásico WIN-WIN).

8. Haz un guión asertivo:

Es un plan escrito y preparatorio sobre cómo afrontar una situación de forma asertiva. Aquí te expongo un ejemplo con los pasos a seguir:

Comunicación asertiva: ejemplo

Escenario hipotético: Tienes un compañero de trabajo que constantemente interrumpe tus tareas con preguntas o conversaciones no relacionadas, lo que afecta tu productividad.

1. Expresar sentimientos y observaciones.

  • Tú: Quería hablar contigo sobre algo que he estado notando últimamente. He notado que a menudo vienes a mi escritorio para hablar sobre temas no relacionados con el trabajo, lo cual puede ser un poco difícil para mí, ya que estoy tratando de concentrarme en mis tareas.

2. Explicar el impacto:

  • Tú: Cuando me interrumpes, me lleva un tiempo volver a concentrarme en lo que estaba haciendo, lo que afecta mi productividad y el cumplimiento de los plazos.

3. Establecer límites y solicitar cambios:

  • Tú: Me gustaría pedirte que, en el futuro, intentes limitar las conversaciones no relacionadas con el trabajo o que guardemos esas charlas para momentos más adecuados, como durante el descanso para café o al final del día.

4. Ofrecer alternativas:

  • Tú: ¿Podríamos acordar algún tipo de señal o indicador cuando esté ocupado para que sepas cuándo es un buen momento para hablar y cuándo necesito concentrarme en mis tareas?

5. Concluir de manera positiva:

  • Tú: Aprecio mucho nuestra relación de trabajo y sé que podemos encontrar un equilibrio que funcione para ambos. ¿Qué piensas al respecto?

La asertividad es una habilidad esencial para una comunicación efectiva y saludable. Practicar estas técnicas te permitirá expresar tus necesidades y deseos de manera clara y respetuosa, creando relaciones más equilibradas y sanas a la vez que mejoras tu autoestima. Y recuerda que ser asertivx no es algo que se logre de la noche a la mañana: es una habilidad y como tal, la práctica es la que hace al expertx (por fortuna en tu día a día tienes infinidad de oportunidades para ponerla en práctica) y así transformar tu manera de comunicarte y mejorar significativamente tus relaciones personales y profesionales.

Espero que estas técnicas te sean útiles y ya sabes, si necesitas apoyo para desarrollar tu asertividad, nuestro equipo de psicólogas está aquí para ayudarte en este proceso. ¡Adelante!

Rebeca Lajos Rañó
Psicóloga en Aidé